martes, 24 de enero de 2012

¿LA CONCERTADA SALE MÁS BARATA?

En relación a la noticia publicada esta misma mañana en el periódico la Nueva España titulada “la concertada le sale barata al Principado” me gustaría hacer las siguientes puntualizaciones.

Las cifras son ciertas  pero tienen una cierta trampa. No es mi intención entrar en una guerra del pasado pública/privada que no beneficia a nadie, o por lo menos no beneficia a los trabajadores de una y otra red. No tengo tampoco la intención de hacer una defensa a ultranza de una red en detrimento de la otra, entre otras cosas porque la ley al respecto es clara: la educación es un servicio público y la programación de la misma se ha de realizar tanto en la red de centros públicos como en los privados concertados. Ni es mi pretensión abrir el debate sobre el carácter subsidiario. Tampoco es mi intención hacer referencia a la desigual distribución entre ambas redes respecto a determinados alumnos que por sus singulares características exigen una mayor dotación de recursos, a pesar de que este aspecto sí tiene una repercusión en la dotación económica.


Es una realidad que nadie discute, que a mayor inversión económica mayor calidad en la enseñanza, con esto no quiero decir que la enseñanza concertada sea de menor calidad porque cuenta con una menor inversión económica por alumno porque esta menor inversión responde a una serie de parámetros que objetivamente reducen los gastos y que todo el mundo puede entender.

Es de todos conocido que la patronal de la concertada ubica sus establecimientos en la zona centro (Oviedo, Gijón y Avilés) donde se concentra la mayoría de la población asturiana, rechazando otras zonas menos pobladas, la enseñanza pública llega, como no puede ser de otra manera,  a todos los rincones lo que dispara el gasto por alumno. La educación en la zona rural no es rentable pero tiene otros beneficios no necesariamente económicos: favorece la integración del territorio, fija población y no discrimina entre ciudadanos de primera y de segunda, es una educación compensatoria de desigualdades y eso, señores, cuesta dinero.

Buena parte del supuesto ahorro económico recae sobre las espaldas de los docentes de la concertada que disponen de más horas lectivas,  porque se ven obligados a impartir más docencia y más horas de trabajo, y estas no se corresponde con sus retribuciones.

No pretendiendo tampoco entrar en el tema siempre espinoso de la voluntariedad de las donaciones económicas que se aportan a los centros por parte de las familias. Sé que es un tema complejo y difícil que no es el momento de abordar.

Sí entiendo, por el contrario, muy peligroso que un sindicato se refiera, como estos días en la prensa regional, a la educación exclusivamente en términos económicos. Extraña, especialmente, que se pretenda contraponer a dos sectores de la población que utilizan las dos redes del sistema educativo asturiano en lugar de dedicar sus fuerzas a mejorar las condiciones de los trabajadores del sector.

Por ello, hacemos un llamamiento a todas las organizaciones sindicales a tratar los temas educativos con cordura, sensatez y responsabilidad porque nunca son buenos tiempos para un enfrentamiento enseñanza pública/ privada pero éstos que nos ha tocado vivir aún lo son menos.