Nuestros gobernantes continúan en su empecinamiento y están dispuestos a aplicar unos “ajustes” brutales, injustos y absolutamente regresivos, que comprometen, quizá de manera irremediable, la calidad de la enseñanza pública asturiana.
Los recortes ya aplicados en los presupuestos de educación, y los nuevos contemplados en el Real-decreto Ley 14/2012 de 20 de abril tendrán efectos desoladores, tanto para la calidad de la enseñanza pública en Asturias como para las condiciones sociolaborales de docentes y no docentes. Incluyen, como mínimo, la pérdida de 500 puestos de trabajo, según la Consejería de Educación, pero nos tememos que pueden se muchos más. Este drama humano no supondrá, además, un recorte del déficit significativo.
En estos momentos se está debatiendo si políticas de austeridad o si políticas de crecimiento, pero en ningún país de Europa se han aplicado los recortes en materia educativa que se han presentado en España. Fuera de aquí, tienen muy claro que los recortes deben dejar al margen los presupuestos educativos, pues la inversión en educación, que no el gasto, será el instrumento más eficaz que nos sacará, de un manera más rápida, y sobre todo, más justa de la crisis.
Ya lo hemos dicho en otras ocasiones, aunque quizá no hemos sido lo suficientemente claros, esto no es únicamente un problema laboral, es un intento por parte de la fuerzas que proponen los recortes, de acabar con el estado social que se define de manera muy clara en nuestra Constitución, es un intento de privatizar todo lo público y de ceder estos espacios al negocio privado. Es por ello que, aunque a la huelga están convocados sólo los docentes, también esperamos contar con el apoyo y la comprensión de las familias que, mayoritariamente, aquí en Asturias, eligen a la enseñanza pública para la educación de sus hijos e hijas.
Los que ya tenemos cierta experiencia sindical tenemos la sensación de que esta nueva convocatoria de huelga va a ser un rotundo éxito. La Administración debe tener la misma impresión, si tenemos en cuenta los servicios mínimos que ha impuesto. Ya los hemos calificado de abusivos, porque así lo son, pues vulneran nuestro legítimo derecho de huelga. Ante este ataque frontal, quizá convenga recordar que todo trabajador/a que se vea incluido en el colectivo de servicios mínimos debe recibir, por escrito, en el día de hoy, información relativa a tal circunstancia, en caso contrario, no estaría obligado a cumplir con ellos. La responsabilidad de los docentes está fuera de toda duda, el próximo martes, una vez más, se pondrá de manifiesto, pero la irresponsabilidad de esta Administración ya se ha puesto en evidencia con la imposición de estos servicios mínimos.
Asimismo no me resisto a comentar el importante grado de hipocresía de la que está haciendo gala esta Administración en los últimos momentos de su gobierno, al encomendar a los Servicios Jurídicos del Principado de Asturias la presentación de un recurso de inconstitucionalidad frente al Real Decreto Ley 14/2012 por entender que invade competencias propias de la Comunidad Autónoma del Principado de Asturias. Tal hecho así debe calificarse, pues con este mismo argumento otras comunidades autónomas han decidido no aplicar los recortes, que como dice la Administración, y que nosotros también compartimos, son totalmente contraproducentes para la mejora de la calidad y la eficiencia del sistema educativo.
La huelga es justa y es necesaria, el camino está siendo largo y aún lo será más, pero las cosas se pueden hacer de otra manera, se deben hacer de otra manera. Contra la mediocridad de buena parte de nuestros gobernantes, los docentes, mañana, hablaremos alto y claro en defensa de una educación pública de calidad que garantice nuestro futuro ante la crisis. Mañana martes, 22 de mayo, secundaremos la huelga y nos manifestaremos junto al resto de la comunidad educativa por las calles de Oviedo a partir de las 19h. Un saludo a todos y ánimo.